Nosotros
Somos una GRAN FAMILIA.
Malena siempre fue y será una
empresa familiar.
Estamos en todos los detalles: atender a los clientes, preparar y entregar sus pedidos,
responder consultas y redes.
Malena empezó como un hobby en el año 90, cuando su hijo más grande tomó la comunión. En aquel momento la estrella era la “tarta de Frutillas” solo para amigos y conocidos.
Antes de esto se dedicó a la venta en los más diversos rubros: bikinis, indumentaria de cuero, perfumería..
Del boca en boca se fue expandiendo lentamente, siempre trabajando en la cocina de su casa involucrando a la familia completa: con el teléfono fijo sonando 24/7, no existían los domingos, los feriados ni los horarios.
Comenzó a perfeccionarse haciendo cursos de cocina y siguiendo a sus maestros fue ampliando su repertorio de tortas. Algunos de sus referentes fueron la Hna Bernarda, Osvaldo Gross, Nilda de Siemenczuk, Marcelo Vallejo.
Malena es una luchadora y emprendedora nata, de la época en la que sólo existía el teléfono fijo, los pedidos escritos en papel (mini agenda) y los rogeles estirados a mano con palote. Horneando solo 2 o 3 por semana (actualmente hacemos 50!)
En el año 2010 me sumé yo “La Colo”, hija menor de Malena. Antes de terminar la facultad -soy biotecnóloga- ya sabía que quería dedicarme a esto.
Empecé ayudandola con lo que ella me enseñaba. Pasaron los años y varias recetas ya las “adopté “. Fuí aportando mi impronta…
En el 2020 con la pandemia tuvimos que reinventarnos un poco, agregando un nuevo tamaño de casi todos los productos. Y después de casi 30 años y mucho esfuerzo pudimos dar el salto: mudamos el negocio a un nuevo espacio y la casa volvió a ser “su casa”.
Actualmente: Malena, yo y dos chicas que nos acompañan hace 20 años, somos las que estamos con las “manos en la masa”.
Somos una GRAN FAMILIA. Malena siempre fue y será una empresa familiar. Estamos en todos los detalles: atender a los clientes, preparar y entregar sus pedidos, responder consultas y redes.
Muchos clientes son mucho más que eso, ya son amigos. En varios casos ya estamos en la tercer generación.. y nos pone muy orgullosos que nos sigan eligiendo.
Gracias por acompañarnos en este crecimiento